Mariano I el mentiroso

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lunes, 2 de marzo de 2015

La deuda: una nueva forma de colonialismo

   El dinero ha sido desde su invención una forma de poder de los que lo tienen sobre los que no lo tienen y llevado al límite es una forma de someter a un pueblo o un país a los designios y voluntades de los más poderosos.
   Se oye con mucha frecuencia que los que necesitan pedir dinero prestado a los que pueden prestárselo se han de someter a la voluntad de los segundos pero como casi todo en esta vida esta situación tiene un límite y en este caso no iba a ser una excepción.
   En el caso de Europa, ¿quién tiene el dinero? La respuesta sencilla y rápida que se nos viene a la cabeza es Alemania, Holanda, Bélgica, Finlandia y alguno más pero la respuesta real es bastante más complicada. Se podría decir que realmente no tienen dinero si no apuntes contables en ordenadores pero si que es verdad que tienen la influencia suficiente para hacer que la máquina de fabricar el dinero contante y sonante funcione o deje de funcionar. Es decir, tienen la llave del BCE que realmente parece ser el Banco Central de Alemania en vez del Banco de los países del euro.
   Manejar a su antojo, es verdad que con la ayuda inestimable de gobernantes como Rajoy y algunos otros, les hace poseer el poder de hacer sufrir a países como Grecia, Portugal, España, etc sin poner en riesgo su propio dinero.
   Cuando se habla de un rescate a un país en realidad se habla de rescatar a los bancos, los propios y los de los países rescatados, poniendo la máquina del dinero a funcionar. ¿Cuál es la verdadera intención de la negativa de Merkel de que sus entidades financieras sean sometidas a los crash test? Muy sencillo: su exposición al riesgo en forma de dinero prestado a bancos griegos, españoles, italianos, etc es tan alta que realmente estarían en quiebra técnica si no se rescatara a esos países.
   Cuando se dice "habeis vivido por encima de vuestras posibilidades" en realidad no se debería obviar que cuando alguien pide prestado el prestamista asume un riesgo "el impago" que llegado este momento todos estos bancos alemanes, franceses, etc no quieren asumir de ningún modo y si para recuperar el dinero prestado (con sus intereses por supuesto) se ha de hacer padecer miseria a los ciudadanos griegos, por ejemplo, se hace en aras del mercado financiero.
   Una pregunta, por otra parte, que debemos hacernos es: ¿por qué pidieron tanto dinero esos países? La respuesta es compleja pero basicamente porque desde Europa se potenció esplendidamente que se pidieran préstamos desmesurados, por ejemplo, a través de los fondos de cooperación ya que no podemos olvidar que tantas obras que se hicieron fueron "cofinanciadas" y si no se tenía el dinero se pedía prestado a bancos europeos que lo recuperaban con intereses. Se utilizó básicamente el mismo sistema que se utilizó con las hipotecas (se inflaron los precios de las obras públicas sin mesura como se hizo con las viviendas para poder amueblar el piso).
   Con respecto a la situación griega y en gran medida a la situación española, nadie puede pensar que se pueda pagar esa gigantesca deuda sin estímulos a la economía y que se logre un crecimiento económico sostenido y a largo plazo. Lo contrario sería como pensar que una familia que tiene unos ingresos de 30000 euros y debe 50000 va a poder pagarlos si sus ingresos en vez de aumentar año a año disminuyen.
   Lo peor de este asunto es que no aprendemos del pasado, esta situación de deuda desmesurada ya la vivieron países como Alemania o Estados Unidos en el pasado y se solucionó con políticas de estímulo a la economía y con quitas de la deuda no con políticas de austeridad que lo único que consiguen es la contracción de la economía y el sufrimiento injustificado de la ciudadanía.
    Si no queremos ayudar a Grecia por si misma, al menos ayudémonos a nosotros mismos o vamos encaminados a la misma situación.

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